El conocimiento científico se obtiene mediante observación y experimentación, el Yoga es la experiencia de la observación interior.
El Yoga indaga en la naturaleza de la conciencia, de aquello para lo que no hay aparato ni sentido humano que pueda medir o valorar, ni apenas palabras ni conceptos mentales para entender y describir dichas indagaciones.
Mediante historias y metáforas pueden asimilarse mejor ciertos conceptos psicológicos, pero no debería perder ni un minuto para escuchar disparatados discursos dogmáticos, religiosos y supersticiosos sin rigor histórico, experiencial ni científico de ningún tipo.
A través del Yoga físico desbloqueamos articulaciones y musculaturas al utilizar la autoescucha y asana (las posturas). El cuerpo humano somatiza de tal forma que al estirar sus músculos podemos descubrir la relación entre tensiones físicas, emociones y pensamientos. Pero no hacemos posturas para sudar a chorros y presumir de cuerpo y poses circenses, el Yoga ni es gimnasia ni es para divertirse o distraerse.
Hay gente que se ha quedado sin adquirir esta poderosa herramienta por culpa de elegir el centro inadecuado y obtener una concepción errónea del Yoga. Prueba en otro sitio.
Las experiencias son personales, el Yoga es individual
Un Yogui es un científico, cree en lo que puede ver por sí mismo mediante la experiencia personal. Un Yogui no adora ídolos, no puede seguir la superstición, es inteligente, tiene visión, no puede tener fe irracional. El Yogui tiene mucha fe, pero la tiene en lo que puede ver por sí mismo, no en lo que le cuentan otros.
Los Raja Yoguis no necesitan compartir su fe o espiritualidad con nadie, la encuentran dentro de ellos y es allí donde la viven. Un Yogui no necesita sentirse identificado con un grupo, ni lo necesita ni le conviene.
La espiritualidad es individual, las religiones por su parte, funcionan en colectivo, puesto que en caso contrario, no hay poder alguno, que es lo que buscan dichos grupos religiosos.

El Yoga y el vaivén religioso
Tiré todas mis estatuillas, ídolos y japa-malas, y volví a empezar de cero, porque el sincretismo y la superstición sobran y no traerán más que gran confusión al aspirante. Hay que olvidarse de toda la fe y el sistema de pensamiento que nos impusieron, ya que las creencias impiden ver la realidad por uno mismo. Por ejemplo, es imposible de comprender bien las técnicas escondidas en los Yoga-Sutra de Patanjali al interpretarlos como las tablas de Moisés.
Siento que un Yogui es un líder independiente, no un seguidor. No pertenece a ninguna escuela de Yoga, intenta ser un buen investigador, no busca seguidores, incita líderes independientes.
La predisposición de la mente es a querer sentirse parte de un grupo, de una «tribu». Dadas estas tendencias, me parece natural que al profundizar en el Yoga exista la posibilidad de tontear con el hinduísmo, budismo, sijismo, sufismo o disparates new age etc. puede ser que el problema sea insatisfacción de identidad y no inquietud espiritual. Es una exótica tentación el cambiarse de religión y jactarse de un nuevo estilo de vida, pero eso no es el camino del conocimiento y la autorrealización.
Detrás de estos pensamientos y actos está casi siempre el Ego buscando reafirmarse a sí mismo, lo que es incoherente con los propósitos esenciales del Yoga. El Ego no es real, y en su lucha por sostener su existencia, es capaz de moldearse a cualquier situación, utilizando tus propios pensamientos se preocupará de ir actualizando su identidad precisamente para que te identifiques con él. En el avance espiritual, el Ego va perdiendo terreno, va perdiendo atención, pero siempre está ahí con su «nuevo chándal», con su nuevo papel a interpretar tratando de absorber continuamente la atención, busca que se crea en el personaje y que caigas en la inercia de sus creencias y reacciones.

Confusión, ignorancia, negocio y proselitismo religioso
Al ir surgiendo tantas interpretaciones, experiencias y escuelas, y por la dificultad que podría tener comprender por uno mismo las escrituras clásicas, impera una profunda confusión e ignorancia en cuanto a la verdadera naturaleza del Yoga y su filosofía atea. Y hay gente que termina en extravagantes ceremonias creyendo hacer Yoga y no sabiendo ni a quién está rezando. El Yoga busca la claridad y el conocimiento pero desgraciadamente parece que el «yoga» ha sido raptado por multitud de intereses diferentes.
El método del Yoga planteará un problema a cualquier dogma cerrado, pues el Yoga sirve para buscar por ti mismo la verdad, y eso no interesa a quien cree haberla encontrado ya. El Yoga podría llevar a más disonancias cognitivas a quienes muestran buena predisposición hacia la meditación que a sus escépticos. Y quien no quiera observar no observará.
Nadie va a entender tu espiritualidad mejor que tú mismo, un buen profesor de Yoga trata de enseñarte la autoescucha, y que, a partir de ahí, encuentres tu propia verdad, tu propia lección.
La espiritualidad no trata de encender una barrita de incienso y apagar el pensamiento crítico. El pensamiento crítico es precisamente el adecuado y necesario para el Yoga. Veamos unas definiciones del planteamiento del pensamiento crítico y dejo subrayadas palabras clave. Observamos algunas cosas que nos resultan familiares a los practicantes de Yoga.
El Pensamiento Crítico se apoya en la formulación de lo que se llama criterios de verdad. Un criterio de verdad es aquella característica o procedimiento por el cual podemos distinguir la verdad de la falsedad y estar "seguros" del valor de un enunciado. Entre los pasos a seguir, los especialistas señalan que hay que adoptar la actitud de un pensador crítico; reconocer y evitar los prejuicios cognitivos; identificar y caracterizar argumentos; evaluar las fuentes de información; y, finalmente, evaluar los argumentos. El pensamiento crítico implica que se debe estar "centrado", en el sentido de que no es simplemente pensar, sino pensar sobre algo que queremos comprender y hacer de la mejor manera posible. El desarrollo del pensamiento crítico está estrechamente ligado a la expansión de conocimiento. Actitud de un pensador crítico: 1) mente abierta 2) dudas sanas 3) humildad intelectual 4) confianza en la razón 5) perseverancia intelectual 6) libertad de pensamiento 7) una alta motivación Fuente: wikipedia
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Muy bueno,me encanta, coincide esta manera de pensar, es mi manera,vamos lo que a traves de los años yo pensaba y ahora ……….esta escrito. Gracias Aitor
Gracias a ti Ana ¡nos vemos pronto!